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domingo, 24 de agosto de 2014

“CORRUPCION JUDICIAL; POLICIAL; Y POLITICA EN CANARIAS” IIIª PARTE:

                       “CORRUPCION JUDICIAL; POLICIAL; Y POLITICA EN CANARIAS”
                                                           
                                         IIIª PARTE:

En los años 80 el PSOE-Canario campaba  a sus anchas por las Islas. Anastasio Travieso Quintana; un auténtico golfo del Puerto, era entonces Gobernador Civil de las Palmas; o creo que ya les llamaban Delegados del Gobierno. El tipo que mas controlaba el contrabando –(de toda clase)- en el interior del Puerto de la Luz era “el Gobernador Civil;  imagínense ustedes como serian el resto de sus compinches; y esto no es ninguna acusación gratuita; yo tengo siempre la mala costumbre de que cuando acuso “tengo pruebas”. Por aquel entonces la Policía investigaba unos apartamentos y pisos en la capital a los que acudían chicas de los institutos: Tomas Morales; Pérez Galdos; Magisterio y Santa Teresa, que se dejaban caer por ahí a cambio de algo de dinero por sus favores sexuales. Se investigo bien; y salió un nombre curioso; e incomodo de tocar también: José Carlos Mauricio –(el mismo que condujo sin carnet 40 años)-; sin embargo, el Jefe Superior de la Policía de entonces, dió orden de mirar para otro lado; y así se hizo. Al “Cambullonero” del Gobernador Travieso lo sustituyo “El Demonio”: Elígio Hernández Gutiérrez –(quien más tarde llegaría a ser Fiscal General del Estado con Felipe González)-; un autentico fan de “Las Injusticias Sobresalientes” ; mala persona donde las hubiera; Magistrado Corrupto donde de toga y puñetas sentase sus posaderas; y sobre todas las cosas “ Un conspirador nato”. Corría ya el año 1989; y yo me disputaba “un escaño bailón” en el Congreso de los Diputados como Nº 1 por la Provincia de las Palmas con el infeliz y embargado hasta las cejas de Lorenzo Olarte Cullén –(Hermano del Procurador “rarito”); que era una especie de “tentempié” del CDS/UCD y algúno más; uno de los artífices de la gran estafa del famoso “Tren Vertebrado” que prometía ir desde ir desde Las Alcaravaneras hasta el Sur; aunque a sabiendas de que era un proyecto evocado al fracaso, por que la empresa Salcai; las cooperativas de taxistas; y varios políticos de los que me acordaré de que los parió –(mas adelante)- conspiraban en la sombra para que no prosperase autorización ninguna de Industria ni de Turismo; él ya sabía del fracaso; a pesar de lo cual convino con su amigo “el Estafador”: Vicente  Castellano Rodríguez el vender las acciones/participaciones a miles de pequeños ahorradores a los que dejó sin un duro y compuestos y sin novia. De aquellas acciones habían cajas llenas en una oficina que me alquiló su amigo en el Edificio Puerto; en la plaza de Manuel Becerra; y no sé porque las guarde; si por una intuición del azar del destino o porque siempre supe que me podrían servir para algo. No hacía mucho; que en aquella otra estafa “programada” del “Parque Tívoli” –(en la Laja)- ya le habían estafado millones de pesetas a mi amiga Malentxu Balanzategui –(la Marquesa del Muni, imagino que el título de nobleza procedería del Río Muni, en Guinea Ecuatorial; cuando aún era provincia Española, y antes de que Manuel Fraga Iribarne se presentara allí ante el Presidente Macías a concederles la independencia; no sin antes garantizarse “sus millonarias contratas”; con las cuales siguió después del derrocamiento de Macías –(que España propició)- por el Teniente Coronel; Teodoro Obiang Nguema Mbasogo –(curiosamente; compañero de promoción del Ex Rey Juan Carlos-I; y el mayor traficante de cocaína de todo el continente africano)-; la tal Malentxu era “mi amiga intima” –(tenia al menos quince años más que yo, aquel día que la encontré enganchada a su perro)- ;bueno; a lo que íbamos: El día de las Fiestas del Barrio del Pilar- (en la Feria del Atlántico)- fui invitado por la Asociación de Vecinos “como  Candidato al Congreso” para ser quien le entregase la Corona; El Centro; El Ramo de Flores a la reina de esas fiestas; sin embargo; sin previo aviso va y aparece allí con el coche oficial de la Presidencia ni más ni menos que el mismísimo Lorenzo Olarte, “una momia” al lado mío; y un montón de “zipizape” para ser él quien hiciera la entrega “y salir en la foto”; cada vez que recuerdo “su mirada de Homer Simpson” directa a mis ojos, me méo de risa; la gran ofensa era que él, todo un Presidente del Gobierno de Canarias se vió obligado por protocolo a sentarse justo a mi lado; yo con 25 años de edad y el con casi 3000; y recuerdo, como si fuera hoy; que la niña elegida Reina le decía a su madre; que quería que fuese yo el que la Coronara Reina; y no “el Viejo ese”: ¡Ja, Ja, Ja, Ja! Lorenzo Olarte la escuchó; se subió al escenario “le largo todo en la mano a la chiquilla” y salió de allí como alma que lleva el Diablo; se comportó como un déspota, haciendo honor siempre a lo que es. En esa semana siguiente tuve noticias de cómo ya habían dado la orden de “mi acoso y derribo” y adversarios y enemigos irreconciliables entre ellos, se pusieron de acuerdo y convinieron “mi caza a cualquier precio”; y efectivamente; siete días después se reunieron: Jerónimo Saavedra Acevedo; Lorenzo Olarte Cullén; Eligio Hernández Gutiérrez; el entonces Alcalde de Las Palmas; José Vicente de León; y una abogada a la que por aquel entonces ya hacía años que en las Alcaravaneras le llamábamos todos: “Garganta Profunda” –(porque comía: mucho, duro, y sin alimento)-; así ganaba sus casos; me estoy refiriendo a la ex-militante del P.P y luego Presidenta de Compromiso por Gran Canaria; María Bernarda Barrios –(Nardy; para los amigos)- que regentaba un despacho de abogados en el Nº 4 de la calle Malteses, en las Palmas; y que compartía con otra abogada “mi azote después” , llamada Mercedes Gómez. La cosa quedó clara; tenían que hacerme la vida imposible; prepararme la cama bien hecha; y obligarme a dimitir antes del 29 de Octubre –(día de las votaciones)-; los sondeos decían que yo Si obtendría el Escaño de Diputado; y ellos no lo podían permitir bajo ninguna circunstancia. Se planifica todo al dedillo: documentos falsos; denunciantes falsos; testigos falsos; etcétera; y se buscan “los apoyos” que eran necesarios: el primero “la prensa amarilla”; es decir; La Provincia/Diario de las Palmas; y segundo, el Juez propicio; que resultó ser “casualmente” amigo intimo de todos ellos; Francisco José Gómez Cáceres; entonces Juez de Instrucción del Juzgado Nº 6 de las Palmas; y comienza “el asedio”.
Para empezar me entero de que esto “en busca y captura”, a las 5 de la madrugada leyendo el periódico en la churrería del Mercado de Vegueta; esa era mi hora de comenzar cada día mi jornada de trabajo; aunque aquella madrugada en lugar de churros con chocolate me bebí un Ron carta oro –(sin desayunar)- el primer ron que me tomaba en mi vida; pero era lo único que me sacó “del sueño” que luego me perseguiría durante casi 30 años –(estos últimos)-. Resultó, que me habían interpuesto unas 20 denuncias en un mismo día: ¿Adivinan quien era el Comisario –(entonces Inspector de Brigada)- que se encargó de tramitar todas las denuncias ante el Juzgado en el mismo día?; pues , el mismísimo J.L.Regalado ¿Qué casualidades tiene la vida eh…., como une el destino a los hombres… eh? –(soy como una especie de imán que solo atraigo a los Hijos de Puta que van por el Mundo; es “mi sino”; digo yo. También otra vez entra en juego “la casualidad” –(por así llamarla, de alguna manera)- y resulta que “de casualidad” está de guardia: ¿Qué Juzgado y que Juez…?; pues ; el mismísimo Nº 6 de Instrucción; y el Juez Gómez Cáceres en persona. Como anticipo; sin tener ni una prueba de las acusaciones; ni tan siquiera sin saber de mi ni a qué me dedicaba “dicto una orden de entrada y registro en mi casa” y la entregó al entonces Inspector Regalado con instrucciones expresas y por escrito, de que se llevase a cabo en hora de la madrugada –(sobre las cinco de la mañana o antes) – al objeto de detenerme y ponerme a disposición judicial ante él para responder de “20 delitos graves”. Esa tarde anterior; yo me encontraba jugando una partida de ajedrez con alguien a quien personalmente admiraba; que me brindo su amistad incondicional –(dicho así por el mismo)- quien amén de haber sido mi abogado desde tres años atrás compartió conmigo “una escena” de esas que unen a dos hombres en un secreto para siempre, ambos juramos; bueno, más bien nos dimos la palabra el uno al otro, porque los dos éramos ateos, era MI AMIGO Fernando Sagaséta de Ilurdoz Cabrera –(abogado fundador de U.P.C; Comunista de pró; defensor de los pobres y sus derechos civiles ; que sufrió en prisión en Barranco Seco; y luchó en la clandestinidad contra el Franquismo toda su vida; por más señas, fumador de tabaco negro, de los empedernidos; el mismo que se jugaba su vida en la reuniones clandestinas de obreros que mantenía en un sotano de la calle Tomas Morales –(frente al Edificio Cristal)- y único comunista que conocí, que tenia siempre su cuenta bancaria de la Caja de Ahorros en números “rojos” –(su color preferido)- ); y en un momento vino a buscarme a la Terraza del Jardín Canario –(en el Parque Doramas)- un Comisario de policía al que yo “adoraba” –(siempre me demostró su lealtad en mis peores momentos)- y que como ya falleció hace dos años lo puedo identificar aquí sin perjudicarle ni su imagen si su honor: Era; Domingo Ruano; uno de esos “HOMBRES HONESTOS Y MUY CABALES”; de los pocos que encuentra en tu vida. Se unió a Fernando Sagaseta y a mí, y nos tomamos con él  un vino del Monte Lentiscal; aunque no era uno de los gustos de Fernando no le hizo el feo a la invitación. Comenzó contándonos lo de mi orden de busca; captura; y detención; fue todo lo prolijo en detalles que pudo; hasta donde pudo; pero me ayudo muchísimo con lo poco que se había enterado. Nos despedimos sobre las 10 de la noche; yo acompañe a Fernando hasta Triana; y me fui directamente –(andando)- a mi despacho de la calle Los Balcones y allí encerrado toda la noche comencé a prepararme toda mi defensa; aun convencido de que todo era algún “error” o de que alguien con intenciones aviesas provocó una situación que ya yo resolvería al día siguiente junto con Fernando; pero nada fue como preveía; y tuve que abstenerme de presentarme allí en el Juzgado hasta que tuviera más información; para abreviar: “Me echaron los perros”: Mañana y tarde, La Provincia y Diario de las Palmas publicaban “a diario” novedades del sumario; y cada día lo engrosaban mas denunciantes. Estúpido de mi; voy y llamo a María Jesús Manrique de Lara y del Castillo Olivares; Señora Viuda de Riesco; y madre de la secretaria personal de José María Ruiz Mateos; y a la sazón prima-hermana del Fiscal Jefe de la Audiencia Territorial “El Pedófilo de la Calle Pérez Galdós” Juan  Javier Guerra Manrique de Lara; y le pido el favor de que vaya a ver a su primo el fiscal y se entere bien de todo antes de yo presentarme. Para que ustedes entren en situación, y en honor a la verdad, he de decir, que María Jesús Manrique de Lara me debía en aquellos momentos –(año 1989)- unos Treinta millones de pesetas; la deuda que tenía conmigo era porque “semanalmente” venía a que la ayudara a cubrir “el agujero” que tenía en un Estanco de Timbre-Tabacalera, en el Paseo de Tomás Morales; un poco antes de llegar a la Clínica del Pino. Todas sus deudas se debían a su ludopatía y a “otros vicios” que tenia; y yo la ayudaba no por pena, si no por que de por medio existía una situación que me era favorable realizar a través de su estanco; así que “una por otra”; aunque nunca logré cobrar ni un duro de esa deuda. Escuchó atentamente y sobria toda mi exposición del asunto; y cuando hube terminado se marchó a casa de su primo el Fiscal –(que no podría verla ni mucho ni muy bien; cosas; trapos sucios de familias de rancio abolengo)-. Cogió un taxi y se encajó en casa de su primo y regresó cuatro horas más tarde con la siguiente noticia; así, en crudo: ¡Dice, que van a por ti..!. No me cogió de sorpresa; pero sí que me sorprendió esa expresión tan escueta; tan contundente; y tan amenazadora; así que me pregunte: ¿Pero; por qué…?. De ahí en adelante no paré de indagar; cada día iba adquiriendo mas la convicción del matiz político del asunto; aunque no terminaba de comprender toda la trama esa de denunciantes; de hechos falsos; de testigos comprados; del periódico publicando día si y día también todas esas falacias; no comprendía toda esa persecución “política; judicial; policial; periodística”: ¿A qué venía realmente todo aquello…?. Lo que tenía “clarísimo” era que no me iba a dejar detener sin saber a lo que me enfrentaba; ni quería; ni podía; ni debía dejar que lo hicieran. Continuo con mis pesquisas por medio de mi amigo común de Pepe Mateo; que era Presidente de la Audiencia Territorial; o lo había sido hasta hacia poco; alguien que me presentó un amigo común de los tres; Augusto Esparza; antigüo miembro del Frente de Juventudes y de la Falange; cuando le conocí era casi octogenario; pero su otro amigo tenía buena mano en el Palacio de Justicia; y fue por ahí a ver qué información obtenía. Nos encontramos en el hall del Hotel Reina Isabel al cabo de seis horas; y allí “me contó”: Era “tan grave; gravísima” la situación; que hice llamar a mi médico privado, el Dr. Pelayo Palacios Aguirre y le pedí que me certificase por escrito que estaba “enfermo”; y fue con ese certificado “falso” con el que envié a mi apoderado a la Junta Electoral de Zona –(sita dentro del Palacio de Justicia)- a presentar mi dimisión como Candidato Nº 1 al Congreso de los Diputados; sin embargo, la gravedad de la situación no tenía nada que ver personalmente conmigo; si no con una cuestión que hasta hoy ha estado mejor oculta; y que debido al empecinamiento que aún hoy mantienen en tenerme “secuestrado” me voy a ver “en la obligación” de desvelar públicamente dentro de poco; no siendo en absolúto ese mi deseo; ni afectándome personalmente, ya no podré guardar mas ese secreto tras casi “30 años” en los que he cumplido “Mi Palabra”  de silenciarlo: ¿Recibido el mensaje Amigo mío…?. Te deseo todo lo mejor amigo.

P/D: Yo ya he sacrificado más de 20 años aquí por ti…..
Continuara….
Ramón Francisco Arnáu de la Nuez.


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